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APRDELESP es una oficina con base en la Ciudad de México fundada en 2012 cuyos socios principales son Guillermo González, Rodrigo Escandón, Ricardo Roxo y Manuel Bueno. Surge como una práctica de investigación sobre el espacio y sus procesos de apropiación que busca cuestionarse los procesos tradicionales de hacer arquitectura. Como práctica de arquitectura, APRDELESP tiene el mismo nivel de compromiso con las infraestructuras pública y privada así como con la física y digital de la oficina.
El desarrollo de estos campos y la exploración de las intersecciones entre ellos son fundamentales para el funcionamiento diario de nuestra oficina y como modo de investigación de las fuerzas de apropiación. Creemos que las oficinas de arquitectura están en una posición crítica para usar sus propios lugares de trabajo y otras infraestructuras como sitios prototípicos de investigación y experimentación espacial.
En esta ocasión, tomando como base la temática mensual del mes de noviembre Prácticas Jóvenes, te presentamos una entrevista realizada a dos de los miembros de la oficina: Rodrigo Escandón y Guillermo González, quienes exponen a detalle el origen y proceso de su metodología de trabajo así como sus reflexiones sobre la labor actual del arquitecto en la sociedad. Sigue leyendo para conocer la entrevista completa.
Mónica Arellano: Me gustaría que comenzáramos contándome un poco sobre ¿cómo surgió la oficina? ¿cómo se conocieron? ¿cuánto tiempo llevan trabajando juntos?
Guillermo González: La oficina empezó formalmente en 2012 aunque llevábamos un par de años trabajando con una metodología más tradicional. A partir de un par de proyectos nos dimos cuenta de que no nos sentíamos tan cómodos con esa idea del arquitecto que intenta convencer al cliente de un único resultado final, ideal, posible y perfecto sino que, buscábamos generar un proceso de diseño que funcionara como conversación. Entonces, la oficina se formó justamente al final de esa primera etapa y al inicio de esta nueva. Yo daba clases en la Universidad Iberoamericana con Mauricio Rocha, Rodrigo tomó ese curso, luego Ricardo nos contactó después de leer un artículo de nosotros en internet, Manuel estudió diseño gráfico en la Universidad Centro y en estos primeros ejercicios, nos unimos para colaborar más que con una sociedad formal y eventualmente brotó en la sociedad actual.
Mónica Arellano: ¿De dónde surge el nombre APRDELESP?
Guillermo González: Cuando empezamos en 2012 nosotros nombramos la oficina "Sobre la apropiación del espacio", porque la entendíamos como una investigación. Nos interesaba que cada uno de estos casos de estudio se fuera sumando para formar parte de este cuerpo de investigación, a diferencia de entenderlos como proyectos sueltos y la metodología como mecanismo de pensamiento nos va permitiendo hilar toda esta toda esta información. Lo que nos pasó después fue que como tema de investigación sí hace sentido, pero como nombre comercial de una oficina nos costaba trabajo referirnos tal cual a nuestra oficina si se llamaba de esta forma, entonces ahí fue cuando cambiamos el nombre a APRDELESP.
Mónica Arellano: Partiendo de que son cuatro socios, ¿cómo es que se dividen las responsabilidades en este proceso?
Rodrigo Escandón: Como parte de la metodología, una de las cosas que hemos hecho es poner mucho esfuerzo en tener una dinámica de trabajo organizada y funcional. Una de las cosas que hacemos es que una vez a la semana tenemos una reunión donde se ven todos los pendientes de los casos de estudio e intentamos tomar todas las decisiones juntos. Hemos intentado tener una especie de sistema que nos funcione para colaborar en ese sentido y tomar decisiones entre todos pero independientemente de eso cada quien tiene sus fortalezas, por ejemplo Manuel es diseñador gráfico y con él vemos más la parte de los subespacios, Ricardo está más enfocado en la parte del taller de los anteproyectos y Guillermo está más enfocado en la parte de los clientes.
Guillermo González: La metodología se basa en que vamos imaginando juntos como un texto que se va escribiendo. Nos funciona muy bien esa reunión semanal porque son decisiones muy pequeñas que al final adquieren un peso importante. En nuestra página aprdelesp.com se puede acceder a casos de estudio en donde se ven los dibujos escaneados y se podrían entender cada uno como una reunión, con anotaciones específicas de lo que cada quien está pensando a modo de esquema. Cuando algo hace sentido a los que están participando en esa dinámica, empezamos a pasar todo esto a la computadora y se vuelve a imprimir ese dibujo, luego se vuelve a rayar y luego se vuelve imprimir. Creo que ha sido muy valioso porque de esa manera vamos construyendo los presupuestos y los proyectos ejecutivos a la par del proceso de diseño y eventualmente, facilita la construcción posterior de lo que se haya decidido. Al final se tienen mucho menos problemáticas que cuando algo no está definido. Yo lo siento mucho como registrar una conversación.
Mónica Arellano: ¿Cómo fue el camino para adoptar y forjar esta metodología que mencionan en el proceso de diseño?
Guillermo González: Es algo que se ha ido actualizando en cada uno de los casos de estudio ya que obviamente van surgiendo muchos cuestionamientos y nos interesa que este proceso se pueda ir transformando. Nos ha ayudado mucho a organizarnos, a entendernos entre nosotros para luego trabajar con los clientes, con otros colaboradores. Paralelo a esto y a la forma en la que estábamos pensando nuestra oficina empezamos a hacer los subespacios:
🍺 La Pipí (lobby-bar)
🖼 Galería La Esperanza
🏖 PARQUE EXPERIMENTAL EL ECO
🎨 CAFÉ DES ARTISTES
🗄 CAFÉ (ARCHIVO)
👀 RADIO AMIGOS (estación de radio en línea)
🌮 LOS EMPALMES
🎤 MUEBLES SULLIVAN
😊 MACOLEN (imprenta)
🥪 CBR
✌ CAFÉ ZENA (café)
Esto ha sido muy interesante para nosotros porque en estas primeras intenciones de no querer tener una oficina totalmente privada, estos subespacios nos permiten vincularnos con diferentes personas que no necesariamente llegarán de una manera tan directa a la oficina. A través de estos subespacios han surgido nuestras amistades, así como la mayoría de contrataciones, colaboraciones con clientes, exposiciones y una serie de eventos que se han generado a través de ese canal de vinculación que no necesariamente controlamos nosotros, como pudiera ser a través de una oficina privada más tradicional.
Mónica Arellano: Algo que noto cada que entro a su pagina web y que ahora confirmo por el lenguaje emplean es que la oficina no está enfocada de una forma purista en una sola cosa, sino como que es una red en donde se conectan varios elementos y que tiene que ver con su relación con la ciudad. La pregunta es, ¿cómo surgieron estos subespacios y de qué forma complementan la práctica de la oficina?
Rodrigo Escandón: Desde el principio nos llamaba mucho la atención cuestionarnos la idea de la oficina tradicional de arquitectura así como la tipología espacial, en donde hay mesas compartidas pero que finalmente, se trata de un espacio privado. Nos interesaba cuestionar esa idea, por eso los subespacios son eso. Al principio, una de las posibilidades que veíamos era que la oficina solo fueran los subespacios, nos preguntábamos ¿qué pasaría si una oficina estuviera regada por toda la ciudad en estos espacios comerciales independientes que están expuestos y que te obligan a participar en las dinámicas de la ciudad?
Guillermo González: Si los arquitectos son los responsables de pensar el espacio, es muy fuerte que el cuestionamiento máximo sobre el espacio no sean las mismas oficinas de los arquitectos. A lo largo de estos ocho años, hemos entendido que sí es necesaria una parte privada, pero también es fundamental mantener estos subespacios por lo que se genera ahí. Además nos interesa que la decisión de trabajar en cierto lugar sea una decisión personal.
Rodrigo Escandón: Es por eso que contamos una infraestructura privada, pública, física y digital, las cuales para nosotros tienen la misma importancia entre ellas. Tenemos un espacio privado que le llamamos el Castillo de Chapultepec y luego por otro lado, tenemos la infraestructura física-pública, que son los subespacios, contamos con la parte digital que es una infraestructura privada conformada por nuestros software de organización, comunicación y archivo, tenemos un sistema específico diseñado por nosotros para organizarnos internamente, nuestro canal de Flickr, YouTube y por otro lado, existe la infraestructura digital-pública aprdelesp.com, que está estrechamente conectada a la parte digital-privada ya que todo se va publicando en tiempo real.
Mónica Arellano: Creo que uno de los temas más importantes en las oficinas emergentes es el peso que tiene el hecho de ser transparentes con el proceso de diseño. Esto sirve mucho para la oficina como metodología de investigación pero ¿cómo es su relación o su aproximación con los clientes o con los usuarios en el proceso?
Guillermo González: Nos interesa mucho que nuestro proceso sea eso, un registro transparente de un proceso de pensamiento en el que participarán muchas personas y eventualmente se llegará a algo. Nos preocupa exhibir o publicar las imágenes del proceso de tal forma que muestren al arquitecto como un genio, con su lápiz grueso que logra hacer obras maestras. Por ejemplo, nos interesa que las fotografías que tomamos del levantamiento –ya sean 500 fotografías y estén borrosas– se muestren tal como se tomaron, queremos que cualquier persona que se acerque a revisar nuestros procesos tome sus propias decisiones. De esta forma se puede leer qué cosas ya estaban antes de que interviniéramos. Pensamos que sería muy interesante ver todo este proceso en las obras maestras de grandes arquitectos. Pero contrario a esto, es muy evidente que por muchos años hemos promovido la idea de un arquitecto frente a una hoja en blanco haciendo líneas. Resulta difícil de estudiarlo y sobre todo de entenderlo.
Mónica Arellano: Por último, ¿creen que el tema pandemia ha afectado directamente su metodología de trabajo o su forma de concebir el espacio?
Rodrigo Escandón: Siempre hemos pensado nuestra oficina como un sitio prototípico de experimentación espacial. El hecho de trabajar a la distancia nos obligó a cuestionarnos todavía más, nos ayudó a entender que nos interesa que algunas cosas se hagan presenciales y otras a distancia. Nos parece muy bueno que ciertas cosas se puedan hacer desde casa, pero no podemos asumir que toda la gente puede trabajar así cómodamente. Hay situaciones familiares, espacios y conexiones de internet que no lo permiten. Por eso nos parece importantísimo el espacio físico de la oficina aunque tener la opción de estar algunos días a distancia tiene muchas ventajas. Sin embargo, creemos que hay cosas que definitivamente no se pueden hacer si no estamos juntos, creo que hay una energía, una magia y una emoción de estar todos en el mismo espacio. Hay cosas que suceden más rápido cuando estás presente.
Este artículo es parte del Tema del mes en ArchDaily: Prácticas Jóvenes. Cada mes exploramos un tema en profundidad a través de artículos, entrevistas, noticias y obras. Conoce más sobre nuestros temas. Y como siempre, en ArchDaily valoramos las contribuciones de nuestros lectores. Si quieres postular un artículo o una obra, contáctanos.
Nota: Esta entrevista fue publicada originalmente el 25 de noviembre de 2020.
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